Vivimos una noche muy especial en el Radisson, en la fiesta de fin de cursos de EduSchool. Fue una celebración mágica, llena de emociones y el cierre perfecto para un año de aprendizaje y crecimiento. Nuestros alumnos nos transportaron a través de la música y el baile, expresando con gran talento la alegría, la nostalgia y la esperanza que caracterizan esta etapa.
Los alumnos de sexto de primaria, irradiaban felicidad, ansiosos por comenzar su aventura en el liceo. Nuestros graduados de secundaria, con la mirada puesta en la universidad, se mostraron preparados para conquistar nuevos horizontes.
El ambiente se llenó de abrazos, risas y lágrimas de emoción al despedirse de sus compañeros y profesores.
Fue el momento perfecto para reconocer la pasión y dedicación de nuestros docentes, quienes guiaron a nuestros alumnos en su camino. También agradecimos a los padres por su confianza y constante apoyo.
La noche se llenó de esperanza y optimismo por el futuro. Sabemos que nuestros estudiantes, con las herramientas que adquirieron en EduSchool, están preparados para enfrentar cualquier desafío y perseguir sus sueños con determinación. El camino no siempre será fácil, pero cada obstáculo es una oportunidad para crecer y fortalecerse. Los grandes logros se construyen paso a paso, con pasión y protagonismo. Y en cada paso que den, nuestros alumnos y egresados saben que cuentan con el apoyo de Eduschool.
La fiesta reflejó el profundo sentido de pertenencia que cultivamos en nuestra comunidad. Durante todo el año, fomentamos la integración y la colaboración, a través de actividades que nos unieron como alumnos, padres y docentes.
Sin duda, fue una celebración inolvidable, llena de emociones, reconocimiento y esperanza, que quedará grabada en la memoria de todos. Y como broche de oro, la tradicional tirada de birretes al ritmo de la canción de Eduschool, un momento que siempre nos llena de orgullo.