Comencé este viaje, cuando estaba haciendo mi doctorado en educación. Las diversas charlas sobre la temática que venía dando y los pedidos de la gente para que escribiera algo para guiarlos, me llevó a escribir mis primeras líneas. Mientras lo hacía, muchas veces dudé si ese momento, era el adecuado, debido a que el doctorado, me demandaba mucho tiempo, el trabajo, la familia. Era demasiado.
Pero mi convicción de que la comunicación eficaz puede cambiar la vida de todos, fue el motor que me llevó a continuar, una línea me llevó a la otra y en un abrir y cerrar de ojos, la obra estaba terminada. Y lo digo erizada y emocionada, porque la verdad, es que llevar dos proyectos tan importantes, como el doctorado y el libro a la misma vez, fue un gran desafío para mí.
El interés de la gente, sumado al mío, fue lo que hizo que no me pudiera contener. Cada vez que resolvía parar, una voz desde el interior me decía que siguiera. Y seguí.
Y soy así, me gusta desafiarme a mí misma, me gusta exigirme y cuando estoy cansada pienso que el esfuerzo va a valer la pena. Así voy sacando fuerzas y no paro hasta terminar, y por suerte, pude terminar mi doctorado y el libro, mas o menos al mismo tiempo.
El libro es conciso, claro, y nos ayuda a entender un poco más sobre la comunicación humana, que dicho sea de paso, se encuentra en una etapa complicada. El mundo está repleto de malos entendidos, de agresiones por malas interpretaciones, de falta de diálogo, de comunicación.
Por eso, en esta obra, exploramos juntos el lenguaje no verbal, ese universo mágico de gestos, expresiones y posturas, que en silencio, habla con una fuerza increíble, mucho más allá de las palabras. Aprender a descifrar esas señales, revelan las emociones y las verdaderas intenciones de quienes nos rodean. Todo esto, es fundamental para lograr comunicaciones efectivas y que los mensajes que tratamos de transmitir, sean recibidos tal y como los decimos, evitando distorsiones o malas interpretaciones.
Mi experiencia, recorriendo caminos junto a personas de todos los ámbitos, desde estudiantes llenos de sueños hasta empresarios con grandes metas, me ha mostrado el poder inmenso que tiene la comunicación no verbal para construir relaciones más auténticas y profundas, y también para abrir las puertas del éxito en cada paso que damos.
Y en este mundo que nos cambió a todos después de la pandemia, donde la comunicación se volvió mayormente virtual, comprender estas señales se ha vuelto aún más crucial.
Este libro, no solo los ayudará a interpretar el lenguaje corporal como si fuera un mapa que nos guía hacia el alma de los demás, sino que también descubrirán cómo usar ese lenguaje para mejorar sus propias habilidades comunicativas, para expresarse con mayor autenticidad y conectar de verdad con los otros.
Los invito a leerlo, a que despierten su curiosidad y descubran el poder oculto que se esconde en la comunicación no verbal. Estoy totalmente segura, de que la comunicación, es el motor fundamental para que las complicaciones sean menores y que podamos con estas herramientas, apuntar a construir una sociedad mejor.
Finalmente, me resta agradecer a Grupo Magro Editores, y a su editor Fernando Díaz, por haber depositado su confianza en mí, y animarme a aventurarme en este camino tan hermoso.